Las impactantes estadísticas de lesiones en los deportes juveniles

Depende de nosotros como padres cerciorarnos de que nuestros deportistas juveniles sigan programas de entrenamiento y acondicionamiento de pretemporada y temporada adecuadamente equilibrados con el objeto de prevenir lesiones de una forma proactiva. Millones de nosotros somos culpables de contribuir a la mentalidad de ganar a toda costa que ha dominado el panorama de los deportes infantiles y juveniles durante la última década, y como consecuencia nuestros hijos están resultando
gravemente lesionados. Examinemos con atención algunas alarmantes estadísticas de StopSportsInjuries.org:

  • Los deportistas de secundaria dan cuenta de una cifra estimada de 2 millones de lesiones, 500.000 visitas al doctor y 30.000 hospitalizaciones cada año.
  • Más de 3,5 millones de niños menores de 14 años reciben tratamiento médico por lesiones deportivas cada año.
  • Los niños de cinco a 14 años dan cuenta de casi el 40% de todas las lesiones relacionadas con deportes atendidas en hospitales. En promedio, la tasa y gravedad de las lesiones aumenta con la edad de un niño.
  • Las lesiones por sobrecarga representan casi la mitad de todas las lesiones deportivas en estudiantes de secundaria y secundaria junior.
  • Si bien un 62% de las lesiones relacionadas con deportes organizados ocurre durante el entrenamiento, un tercio de los padres no hace que sus hijos tomen las mismas precauciones de seguridad durante un entrenamiento que durante un partido.
  • Un 20% de los niños entre ocho y 12 años y un 45% de aquellos entre 13 y 14 años tendrán dolor de brazo durante una temporada de béisbol juvenil.
  • Las lesiones asociadas a la participación en deportes y actividades recreacionales dan cuenta de un 21% de todos los traumatismos encéfalo craneanos entre los niños de Estados Unidos.
  • De acuerdo con los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés), más de la mitad de todas las lesiones deportivas en niños son evitables.
  • Entre los deportistas de cinco a 14 años, un 28% de los jugadores de fútbol americano, un 25% de los beisbolistas, un 22% de los futbolistas, un 15% de los basquetbolistas y un 12% de los jugadores de softball resultaron lesionados mientras jugaban sus respectivos deportes.
  • Desde el año 2000 se ha quintuplicado la cantidad de lesiones graves al hombro y codo entre los jugadores de béisbol y softball juvenil.

Si albergamos una secreta esperanza de que nuestro hijo o hija se convierta en un deportista de elite, deberíamos poner atención a esta advertencia estadística: mientras más de 38 millones de niños practican deportes cada año, solo un 2% de los deportistas de secundaria en Estados Unidos obtendrá una beca deportiva a un establecimiento de la Asociación Nacional de Deportistas Universitarios (NCAA). ¿La probabilidad de que su hijo deportista cumpla el sueño olímpico de sus padres? Bien, todos tenemos que considerar esto: solo 529 deportistas compitieron por Estados Unidos en los Juegos Olímpicos de Londres 2012.

Queremos que nuestros hijos desarrollen su potencial deportivo y lleguen a ser lo mejor que puedan, pero al presionarlos demasiado, y no de una manera equilibrada, corremos el riesgo de arruinar sus aspiraciones deportivas. En algunos casos, puede terminar en incapacidades físicas permanentes. Eso es algo que ningún padre quiere para su hijo o hija. ♦

From Kim John Payne, Luis Fernando Llosa, & Scott Lancaster. Más allá del triunfo: Cómo educar a tus hijos de manera inteligente en un ambiente deportivo toxicó, Lyons Press, (Connecticut, 2013).